La tercera estrella de mar que traigo, la cuarta si contamos la que fotografié en el acuario de Almuñecar (pincha aquí para verlas todas).Ahí donde la veis tan tranquila tiene dos enemigos peligrosos: un caracol marino que la depreda y el peor de todos: el ser humano que la vende desecada a los turistas, aunque por Calahonda no haya visto nada parecido, afortunadamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario